Buda Roses está compuesto por las Directoras de Casting Jimena Burgueño Buda (izquierda) y María de la Torre Roses (derecha), cuyos caminos se cruzaron justo antes de la pandemia. Buda Roses se afianzó en la distancia y sigue pisando fuerte hasta el día de hoy. Desde que las conocimos hemos podido ver cómo se apoyan, se aconsejan y se aportan puntos de vista diferentes. Sin duda, juntas forman un gran equipo.
Hola chicas, ¿cómo estáis? Primero de todo, gracias por concedernos esta entrevista. Buda Roses nació en pleno confinamiento, ¿cómo vivisteis ese proceso?
Imagina a dos personas que no se conocen de nada. Ambas están en un momento muy interesante de su carrera: tienen ganas y están preparadas para volar. Imagina que esas dos personas quedan, se ponen cara y surge la magia. Imagina que una semana después de ese encuentro el mundo frena en seco. Imagina que no pueden extender sus alas, deben permanecer en una jaula. Las calles se vacían, las tiendas cierran, los bares no existen, se baja el telón y se funde a negro. Imagina esas dos personas como locas por pisar el acelerador, pero no hay combustible, no hay siquiera un camino por el que acelerar. ¿Qué haces? Pues aparcas el Delorean en la calle y te encierras en el garaje para crear al más puro estilo Silicon Valley.
Las crisis agudizan el ingenio, y el nuestro tiende a ser juguetón… así que le dedicamos muchas horas a crear este proyecto, a pensar como nos gustaría trabajar juntas, cómo nos llamaríamos, cómo sería nuestra imagen, nuestro logo, el dossier, cómo nos íbamos a comunicar.
Sin el parón de los primeros meses, todas estas decisiones se hubiesen tomado bajo otro prisma. Quién sabe qué habríamos hecho, o que habríamos dejado de hacer por no tener tiempo.
¿Por qué Buda Roses? ¿Qué os aportáis la una a la otra?
Buda Roses son nuestros apellidos maternos, que además de molar un montón sentimos que nos representan a la perfección. Son el bagaje que traemos y que se complementa.
Entre nosotras tenemos muchas cosas en común, y creemos que por eso tuvimos feeling nada más conocernos. Hay veces que una suelta una idea y la otra mira con los ojos muy abiertos y dice “estaba pensando exactamente lo mismo”, y esa conexión es muy guay.
(M) Yo soy muy maniática con el orden. Necesito tenerlo todo apuntado, registrado, etiquetado; llámalo como quieras. Tengo excels para todo: tareas, gastos, facturas, agencias, productoras, cursos, eventos, propuestas… No se me escapa nada. También soy la reina de los calendarios. Y para mí, Jimena tiene una experiencia que es oro, y además, la generosidad de compartirla. Me gusta mucho ver cómo las personas que están a mi alrededor disfrutan de su trabajo. Aprendo un montón tanto de esa persona, como de mí misma, porque me hace ver cosas que sola quizá serían invisibles.
(J) Yo odio los Excels. Prefiero infinitamente el Final Cut, el Canva y leer libros sobre interpretación y dirección. María hace que nuestra organización sea eficiente e insuperable. Aguanta mis manías y respeta que pueda pasarme horas maquetando un dossier o ajustando un montaje. Tiene una energía luminosa y un sentido del humor que me mantiene despierta y activa. Nos venimos arriba con cierta facilidad y cada día es una fiesta.
Nos gustaría saber qué es lo primero en lo que os fijáis cuando veis a un actor/actriz entrar por la puerta del casting por primera vez.
Lo cierto es que cuando un actor entra a la sala, por lo general, ya tenemos bastante información: o le conocemos o hemos visto su material para citarle a casting. Pero en plena prueba, vas a intentar captar la energía con la que esa persona aparece para poder trabajar con ella. Hay veces que los nervios son tan evidentes que antes de entrar en faena necesitas trabajar todo ese torbellino, hacerle sentir en un ambiente sin tanta presión porque los nervios son buenos, pero nos pueden jugar malas pasadas.
Una vez que nos hemos calmado todas y todos, hay que trabajar la propuesta que trae esa persona. Ver si va en la línea de lo que producción y dirección quieren. Después podemos ponernos a jugar.
Después de haber visto a tantos artistas en acción, ¿consideráis importante que un actor/actriz esté formado?
Claro, pero igual que debería pasar con todas las profesiones. Este es un trabajo muy exigente, tanto física como mentalmente, que requiere mucho entrenamiento diario y mucha investigación. Es probable que necesites probar muchas técnicas hasta encontrar la que te funciona. Y después tendrás que seguir entrenando diariamente. Si eres un violinista virtuoso pero no tienes el violín afinado…
Hay que formarse, entrenar, probar, ensayar, equivocarse y aprender. Ningún deportista de élite va a las olimpiadas sin haber entrenado muy duro. Debemos hacer lo mismo. El rodaje, por pequeño que sea, es nuestra olimpiada.
Está siendo un año diferente y lleno de cambios para todos, llegando a afectar directamente a los castings presenciales. ¿Qué pensáis del casting por self-tape?
Pues que seguramente haya llegado para quedarse, aunque no nos guste, al igual que muchas otras cosas: la mascarilla, el gel o tener que rechazar cookies en el ordenador todo día. El self-tape tiene sus cosas buenas, tanto para quien lo hace como para quien lo recibe.
Si te piden que lo hagas, puedes tener la seguridad de que vas a mandar tu mejor toma, y ésta a lo mejor te sale a la segunda o a la decimotercera vez; cosa que en un casting presencial no pasaría, además de que lo estás haciendo en un ambiente menos hostil, eliminando gran parte de los nervios y la tensión que conlleva la sala de casting.
A nosotras nos permite ver a muchísima gente en muy poco tiempo y con menos limitaciones como las geográficas. Pero hay cosas que no puedes valorar en un self-tape, como la capacidad del actor/actriz para recibir indicaciones, la flexibilidad de su propuesta o su predisposición para jugar.
Es una muy buena herramienta pero no podemos prescindir del casting presencial, nos lo hemos currado entre todxs para que sea seguro, y así lo hacemos.
Si tuvieseis que elegir entre casting online o presencial, ¿con cuál os quedaríais?
Está claro: presencial después de una buena ronda de self-tapes o videobooks, pero no hay nada como el directo. Ahí es donde tienes toda la información.
Les hemos propuesto a nuestros seguidores formar parte de esta entrevista, estas son algunas de sus preguntas:
¿En qué momento supisteis que querías ser Directoras de Casting?
(M) Para mí ha sido algo progresivo. Desde pequeña sabía que quería contar historias. Con 6 ó 7 años cogí un par de folios, los doblé por la mitad y escribí mi primer libro con sus ilustraciones y todo. Se lo mandé a El Barco de Vapor preguntándoles si me lo publicaban y me lo devolvieron sin más, pero vamos, que no me afectó mucho. Pensé “ok, debo esforzarme un poco más”.
También organizaba un montón de saraos artísticos con mis primas. Actuábamos para la familia, hacíamos versiones de canciones con unas coreografías muy trabajadas la tarde anterior y exigíamos atención plena. Grabábamos programas de radio imitando a personajes famosos (una vez fui Ana Obregón mientras mi prima hacía de Fernandisco).
Siempre he pensado que transitar por diferentes formas de contar cosas te hace tener una perspectiva interesante. Empecé Historia del Arte, seguí con talleres de literatura, narrativa y me pasé un rato a la fotografía, pero finalmente me quedé con el guion y la creación de personajes, y ahí fue cuando sentí el tirón fuerte. Porque cuando te pones a crear, llega un momento en el que lo haces como si fueses dios, y le dices a esa nueva criatura que está adquiriendo forma “mira, vas a tener este rango de edad, vas a tener estos rasgos de personalidad, vas a ser así, asá y asó” pero, cuando esa información traspasa el folio y llega a la mente de la actriz o el actor, se produce un salto cuántico que va desde la hoja pasando por todas las células de quien interpreta, inundando con todo su ser y haciendo que deje ese mundo imaginario y habite la realidad, el cuerpo humano, y se convierta en algo tangible… Ya no eres dios, ahora eres la persona que ha traído al mundo a un personaje, eres la partera. Eso es tan bonito como ser dios.
(J) Yo nunca hice de Ana Obregón, pero también dirigía espectáculos a una tierna edad. Creo que jamás me he disculpado con mis padres como se merecen. Hacía ballet desde muy pequeña y comencé interpretación durante la adolescencia. Rápidamente decidí que me gustaba el trabajo tras la cámara, así que estudié Periodismo y Comunicación audiovisual. Durante la carrera entré en Tesauro, que era una productora brutal para aprender. Empecé en Producción y realizando Making-of, pero como conocía el mundo de la interpretación, poco a poco fui virando hacia el departamento de Casting.
Después estudié Arte Dramático especializado en Dirección escénica, y empecé a trabajar como Directora de casting freelance y como ayudante de dirección en algunas producciones teatrales para teatros importantes. Ahora no me imagino haciendo otra cosa… O sí, me imagino, pero no me gustan tanto.
¿Qué perfiles son los más demandados desde que se reactivó la industria?
Quizá el parón y reactivación coincide además con un momento social que estamos viviendo muy importante. Todo lo que está pasando a nuestro alrededor influye para que artistas de todo el mundo muestren lo que tienen que contar. Todos los movimientos sociales destapan la gran variedad de historias que podemos llevar a una pantalla.
Nos encantaría que se demandasen cada vez más, por ejemplo, mujeres mayores de 35 años, personas no binarias, personas gordas, altas, bajas, razas, y todo un sinfín de referencias, pero lo ideal sería que no fuese para representar un cliché. Ahí es donde creo que tenemos que hacer hincapié, por ejemplo: que una persona negra no tenga que hacer de mantero o de prostituta. Yo (M) he vivido en un pueblo muy pequeño y mi médica de cabecera era una mujer negra. Lo normal, vamos.
¿Cuándo pensáis que se podrá volver al ritmo anterior?
Por nosotras, mañana. Queremos decir, tenemos todas las herramientas para hacer un casting casi como los de antes, eso sí, con todas las medidas de seguridad. Por otro lado, el pensar en el “ritmo” nos trae a la cabeza momentos de verdadero frenesí, y esperamos que éste parón obligado nos haya hecho recapacitar. Creemos en modelos de vida y producción sostenibles, a todos los niveles.
En cuanto al trabajo previo al proceso de casting, ¿cuándo comienza la visualización del personaje?¿Buscáis perfiles muy concretos?
Desde que lees por primera vez el guion. Es automático. Empiezan a venirte nombres de actores e ideas. También depende de lo que tenga la directora o director en la cabeza. Si tiene una idea muy clara tienes que tirar por ese camino, aunque a nosotras en este caso también nos gusta sorprender con nuestras propuestas.
Cada proyecto es único y totalmente diferente. Puede compartir algún rasgo, alguna idea, pero por lo general cada trabajo es un universo nuevo.
Desde vuestra experiencia, ¿consideráis importante que un actor domine idiomas o acentos?
Todo suma. Cuanto más versátil seas, más opciones te llegarán para más perfiles. Esto no significa que si no se te dan bien los idiomas o cambiar el acento no vayas a actuar. En ese caso elige entre trabajar lo que no dominas o explotar tus puntos fuertes.
Los idiomas abren puertas en todos los sectores. It’s true. En este momento en el que hablamos de inclusión y globalización quizá sea más importante que nunca. De la misma manera que esperamos que haya diferentes nacionalidades representadas en las producciones nacionales, deseamos que cada vez haya más actores españoles en proyectos internacionales.
¿Cuánto peso tenéis en la decisión final del casting? ¿Sois vosotras las que tenéis la última palabra?
No, y como en cualquier otro departamento (arte, montaje, vestuario…) la última palabra la tiene dirección, producción, plataforma, cadena o cliente (en caso de publicidad). Nuestro trabajo consiste en facilitar esa decisión final; y obviamente si te equivocas en tus consejos y confían en ti, el resultado puede ser catastrófico. Tenemos mucha responsabilidad aunque no tomemos la última decisión. Si yo me empeño en un actor para un personaje pero resulta que no es la mejor opción, y por mi insistencia ha sido la elección final y luego en el rodaje pasan cosas por las que no se puede trabajar… Imagínate.
La decisión final no es nuestra pero la responsabilidad de ofrecer y recomendar buenas propuestas sí.
¿En qué consiste el día a día en vuestra oficina?
Pues nuestro día a día es bastante frenético, aunque parezca que no. No estamos siempre en la terraza tomando el sol. 😉
Cuando no tenemos un proceso de casting abierto vamos a estar haciendo miles de cosas más. Cada día recibimos muchísimos mails tanto de los agentes y representantes como de actores y actrices. Esos mails los vemos todos, y os aseguramos que es un currazo.
Trabajamos en nuestras redes sociales, porque sabemos que en la actualidad tienen un peso muy importante. Leemos, estudiamos e investigamos sobre cultura, el sector y el arte en general. Vamos al teatro siempre que podemos. Y vemos cine y series tanto nacionales como internacionales.
Además tratamos de conectar siempre con compañeras y compañeros de la industria. Abanderamos el networking como algo muy positivo y que además disfrutamos un montón.
Chicas, desde que nos conocimos hemos tenido muy buen feeling entre nosotras. ¿Qué ideas creéis que compartimos Premiere Actors y Buda Roses?
Creemos que compartimos un espíritu joven y creativo. Vemos la profesión como algo muy serio, que hay que enfrentar con mucha responsabilidad, pero sin que sea un sufrimiento extremo. Hay seriedad, pero no puede faltar el humor y disfrutar del camino que hemos elegido, que es, de todo corazón, muy hermoso.
Vuestra comunicación nos parece muy útil y didáctica, haciendo que sea muy fácil de gestionar. Lo sencillo realmente funciona. Como decís en uno de vuestros post, con información, todos tomamos mejores decisiones.
Para finalizar esta entrevista tan interesante, ¿qué consejo le darías a nuestros actores lectores para enfrentarse a un casting?
Esto es una carrera de fondo, no vale con estudiar el día antes del examen. Cuando te llegue la convocatoria del casting, con suerte, tendrás unos días para preparar esa prueba, pero todo lo demás lo has tenido que estar trabajando ya: el violín tiene que estar afinado cuando vayas a tocar la partitura que te han enviado.
Sabemos que a veces es más fácil la negación, pero es preferible enfrentar la prueba e ir a por todas: vas a tener una cantidad de información en la convocatoria que debes manejar: quién dirige, quién produce, fechas, lugar de rodaje, tiempos… Toda información es importante y poderosa, úsala.
Muchas gracias por concedernos esta entrevista, Buda Roses. Desde Premiere Actors queremos desearos mucha suerte y muchos proyectos en este 2021. Ha sido un auténtico placer, Buda Roses, ojalá nuestros caminos se vuelvan a cruzar en el futuro…
¡A vosotras! Nos lo hemos pasado fetén. 🙂
Y a ti, amigo lector, esperamos que esta entrevista te haya ayudado a conocer más la otra cara de un casting. Si queréis seguir conociendo a más profesionales de la industria y leer nuestros artículos semanales que te ayudarán a crecer y a impulsar tu carrera de actor puedes suscribirte a nuestro blog.
¡Hasta pronto!