Cada vez que nos metemos en la piel de un personaje, lo hacemos porque tenemos una historia que contar a alguien que está dispuesto a escucharla. Es decir, actuar significa comunicar.
Por tanto, el proceso de comunicación que realizamos cuando salimos a escena sería el siguiente: los actores somos los emisores, que enviamos un mensaje a nuestro receptor, es decir, el público. Si conseguimos que éste entienda lo que queremos transmitir, habremos hecho una correcta interpretación.
Sin embargo, no nos ganaremos al público logrando simplemente que nos comprenda. Para que salga de un teatro satisfecho con tu trabajo tendrás que desarrollar otras habilidades imprescindibles. ¡Veamos qué hacer para conseguir su aceptación!
Analicemos al público
En primer lugar, debemos detenernos en analizar al público al que nos vamos a dirigir y tratar de entenderle.
Esa multitud de gente que nos está mirando expectante está compuesta de personas normales y corrientes, de todas las edades y profesiones, que están en un momento agradable de ocio. Por tanto, están predispuestos a pasárselo bien. Así que olvídate de todos esos miedos o bloqueos que te invaden cuando les consideras dioses o jueces en vez de gente agradable. Recuerda que esos desconocidos quieren pasar un buen rato y están muy receptivos.
Seguramente, tu público valore positivamente el coraje que tienes saliendo a actuar, porque ellos mismos serían incapaces de hacer algo así. O bien, en caso de que sean personas que sí que se suelan enfrentar al público por cualquier motivo, sabrán el esfuerzo y la preparación que supone.
Así que tranquilo, tienes todas las papeletas para conquistarles. ¡Ya sólo te falta afilar tus herramientas!
1º herramienta: empatiza
Según el Diccionario de la Lengua Española, empatía significa “sentimiento de identificación con algo o alguien”, es decir, ponerse en la piel del otro.
No importa que seas el bueno o el malo de la historia, cada personaje tiene su propia línea de pensamiento. Si consigues que el público empatice con tu personaje, habrás conseguido compartir con los espectadores tus ideas y provocarles sensaciones. Y todo ello no les dejará indiferentes.
En definitiva, la clave consiste en que entre emisor y receptor exista una conexión, es decir, que entre el público y tu exista un intercambio de emociones y pensamientos.
2º herramienta: trabaja mucho tu personaje
El segundo secreto para ganarte a tu público consiste en salir a escena lo más preparado posible.
Cuando controlas perfectamente tu interpretación, transmites al público una confianza que le permite bucear en tu historia y dejarse llevar por lo que le estás contando. Así que ya sabes, mucho ensayo y mucho trabajo previo para poder ofrecer un trabajo que sea digno de una buena crítica.
Te aconsejamos que prestes especial atención a los primeros minutos de tu interpretación. Si desde el principio les enganchas con la trama y consigues impresionarles con tu actuación, te resultará mucho más fácil mantener esta seducción durante toda la obra. Por el contrario, si empiezas con una interpretación flojita, te va a costar bastante hacerles cambiar de opinión.
3º herramienta: supera sus expectativas
El público, antes de que empiece la obra, ya tiene una idea preconcebida de lo que va a encontrarse, es decir, ya se imagina que ocurrirán ciertas cosas. Seguramente habrá visto por Internet comentarios de otros espectadores o algún amigo le habrá dado su opinión. En cualquier caso, tu misión debe centrarse no sólo en cumplir sus expectativas, sino en tratar de superarlas.
Además, es muy importante que controles muy bien el tiempo. Ellos habrán revisado previamente la duración de la obra y habrán organizado sus planes en base a eso. Trata de ajustarte al tiempo que estableciste, ya que si se alarga más de la cuenta seguramente se impacienten y eches por tierra todas las herramientas que acabamos de ver.
En definitiva, si consigues empatizar con tu público, ofrecerles un gran trabajo actoral y superar sus expectativas, te los meterás en el bolsillo y el aplauso que recibirás será el mejor de tus premios.
¿Tienes algún truco más para ganarte al público? ¡Compártelo en nuestras redes y hagamos de nuestras próximas actuaciones algo memorable!