Durante los estudios de cine o teatro, muchos artistas se encuentran inmersos en trabajos, entrenamientos o proyectos finales que se acaban convirtiendo en algo más que una simple tarea. Lo que al principio fue una sola idea, ahora es un proyecto al que ven mucho valor y, por tanto, quieren llevar a la realidad.
En Premiere Actors damos clases en muchas escuelas y también lo vemos a menudo en nuestra asesoría. Es algo que ocurre muy a menudo y, sin embargo, hasta ahora nunca habíamos hablado de ello.
¿A ti también te ha pasado? ¿Alguna vez te has preguntado qué podría llegar a ser tu trabajo de fin de curso?
En algún momento surge la chispa
Como comentábamos, puede tratarse de un cortometraje, un trabajo de fin de grado (TFG), de máster (TFM), un entrenamiento o de cualquier otro proyecto. El caso es que no solo tratas de resolverlo para salir del paso y conseguir tu aprobado, sino que te acabas volcando en él. En algún momento del proceso se ha convertido en una pepita de oro a la que has visto un fuerte potencial, y ahora quieres que vea la luz, en la vida real.
Las razones son muchas: ya sea porque es una historia que consideras que la gente debe disfrutar, porque quieres dar visibilidad a un asunto que del que es importante hablar o reflexionar, porque han valorado muy bien el trabajo a nivel estudiantil y ahora te planteas llevarlo más allá o, simplemente, porque sí. Te has enamorado de tu proyecto y ahora quieres darle vida.
Esta chispa emprendedora es el punto de partida para transformar tu trabajo académico en un negocio real. Pero, ¿cómo?
Lo que vas a necesitar
1. Investigación de mercado a fondo:
Es posible que ya hayas hecho este análisis en tu trabajo, pero una cosa es que quede bonito sobre el papel (incluso poniéndote en el mejor de los escenarios para que tu profe o supervisor lo vea viable y le dé el visto bueno) y otra cosa es conocer en profundidad el mercado en el que te quieres meter.
Nuestra recomendación es que, antes de ponerte con “lo bonito” del proyecto y empezar la casa por el tejado, intentes hablar con otras personas que hayan pasado por lo mismo o que busques entrevistas en Internet donde expliquen cómo empezaron, los retos a los que se enfrentaron y cómo ha ido evolucionando su proyecto.
No importa si quieres montar una productora audiovisual, una compañía teatral, una agencia de representación, mover tu corto por festivales o ayudar a otros artistas con sus redes sociales. Cuanto más contexto tengas del mercado en el que te vas a mover, mejores decisiones tomarás desde el primer minuto.
2. Apoyarte en otras personas:
Por mucho que te guste ir por tu cuenta, es posible que necesites un socio, un profesional que te ayude con algún aspecto determinado que no se te da bien o crear sinergias con alguien que te aporte recursos para dar tus primeros pasos, ya que es posible que empieces con pocos medios.
Además, hacer partícipes de tu proyecto a la gente que tienes a tu alrededor te dará la fuerza necesaria para ir sorteando los obstáculos, facilitarán el boca a boca y lo más probable es que llenen la sala los primeros días o sean tus primeros clientes.
Nunca nos cansaremos de recomendarte que acudas a todos los eventos del sector que puedas, porque es una increíble fuente de aprendizaje y en seguida harás contactos con gente que te comprende y que te apoya. (Si no sabes cómo hacerlo, tenemos este curso).
3. Estrategia clara y definida:
Si hiciste en clase un dossier teatral, un plan de negocios o un desglose de tu obra (audiovisual o teatral), lo más seguro es que no se ajuste demasiado a lo que será la realidad. Pasarás 100% por esta situación y es algo completamente normal. 😉
Es muy común empezar por la escenografía, el logo de tu marca o el perfil de las redes, es decir, la parte creativa del proyecto, ya que eres artista. Y luego, cuando va llegando el resto del trabajo, te asustas y te bloqueas.
El camino se hace haciendo, y en tu recorrido te darás cuenta que había costes que nunca habrías pensado, que necesitas más trámites, permisos o licencias de las que te imaginabas o que los tiempos que habías marcado eran demasiado optimistas.
Pero todo tiene solución. Por eso, es tan importante contar con un mentor o algún profesional que te ponga todas las cartas sobre la mesa y revise bien lo que tenías hasta ahora. Quizá te lleves tus primeras sorpresas, pero te ahorrará muchísimo tiempo y quebraderos de cabeza. Juntos buscaréis alternativas y daréis forma al proyecto para que llegue tan lejos como sea posible.
4. Financiación:
Seamos claros, por mucho que empieces a “darte a conocer por las redes” o “hagas todo desde tu ordenador”, tendrás gastos. Y si tienes que alquilar espacios, comprar material o desplazarte, la cosa va aumentando. Gestiones tan básicas como el registro de tu marca o adquirir unos derechos, aunque no cuesten mucho, nunca son gratis, y todo va sumando.
Por eso es tan importante pensar de dónde vas a sacar el dinero: de tus ahorros, de un préstamo familiar, del banco, de algún sponsor o de ayudas y subvenciones.
Si tu capacidad económica es muy limitada, tampoco hay que tirar la toalla. Como has visto, hay soluciones para todo. Por eso, repetimos, es tan importante la figura del mentor, porque este profesional te enseñará alternativas que a lo mejor nunca se te hubieran ocurrido. A lo mejor te das cuenta que te ibas a ir de precio en la contratación técnica y artística de tu obra, ¡y resulta que hay otras fórmulas mejores para contratar!
5. Todo en regla:
Documenta y registra todo. No esperes a que tu proyecto esté 100% terminado; puedes hacerlo desde tus primeras versiones.
La forma que das a tus ideas vale oro, y hoy en día, hasta los textos que escribes o los vídeos que editas para las redes sociales los puedes registrar. ¿Por qué no hacerlo entonces con tu guion, el diseño de tu web o tu nombre artístico?
También es importante que entiendas y cumplas los requisitos legales y regulaciones pertinentes para tu proyecto: la protección de datos si pides el teléfono o el email a la gente, los derechos, las licencias… ¡No dejes que tu proyecto se eche a perder por no haberte enterado a tiempo de lo que necesitabas!
Llevar a cabo tu proyecto puede no ser siempre un camino fácil, pero es tremendamente enriquecedor. Si además de artista te sientes creador, te aplaudimos y felicitamos sinceramente. Nuestra industria necesita más gente como tú, y por eso en Premiere Actors siempre tendrás todo nuestro apoyo.
Si te estás planteando sacar adelante tu propia compañía o proyecto teatral, te esperamos con los brazos abiertos en nuestro intensivo “Objetivo: Compañía de Teatro”, que comienza en pocos días.
Y si tienes en mente cualquier otra idea a la que no sabes cómo dar forma, estaremos encantados de explicarte cómo ponerla en marcha. ¿Hablamos?
