Has fijado fecha y hora para tu sesión de fotos y quieres que todo salga perfecto. Tienes los cambios de ropa más o menos claros, así como una idea general de cómo te gustaría que fueran tus fotografías. Sin embargo, hay una duda que no sabes como resolver: ¿deberías llevar a alguien para que te ayude, o no es necesario?
Cuando sí debes ir acompañado
- Cuando eres menor de edad
Siempre que tengas menos de 18 años es necesario que vayas con alguno de tus padres o tutor legal, ya que ellos son los responsables de aceptar y supervisar el desarrollo de la sesión.
- Cuando eres muy inseguro
Puede que seas de los que piensan que seguramente te vayas a bloquear en medio de la sesión, te da miedo no saber posar o te sientes demasiado vulnerable delante de una cámara. En todos estos casos, aunque el fotógrafo siempre te dará la confianza necesaria, puede que consideres una buena idea llevar a alguien de tu entorno que te aporte una seguridad extra.
- Cuando tu representante quiere supervisar la sesión
Los representantes a veces solicitan estar presentes, ya que saben muy bien lo que buscan en el actor y el resultado que necesitan, todo ello acorde con su propia estrategia comercial.
- Cuando no sabes nada del fotógrafo o empresa
Puede que no quieras llegar solo a un sitio desconocido por primera vez. Si necesitas esa protección para tener la tranquilidad de que no va a pasar nada, no lo dudes, pide a alguien de tu entorno que te acompañe.
En todos estos casos, cuando quieras llevarte a alguien a la sesión, el fotógrafo no debería ponerte pegas. Lo normal es que te permita ir con quien quieras, siempre que “sume”, es decir, que no reste o retrase la sesión.
Si al fotógrafo no le gusta la idea de que vayas acompañado, o te impide hacerlo, tendrás un buen motivo para desconfiar de él.
¿Qué persona es la más indicada para acompañarme?
La mejor opción es elegir a alguien con quien tengas una gran confianza y complicidad. Que sea mayor o menor que tú es indiferente, lo importante es que te entienda perfectamente.
Lo bueno de contar con esta persona es que te ayudará a elegir el orden y los looks de los diferentes cambios de ropa y, sobre todo, hará que te sientas a tranquilo y a gusto sabiendo que está allí.
Es importante que evites llevar a gente con quien te sientas juzgado o que consigan que te entren vergüenzas innecesarias. Este es el típico caso de quienes van acompañados de sus novios o novias, cuando estos son muy celosos o excesivamente protectores.
De todas formas, lleves a quien lleves, no tiene por qué tragarse toda la sesión en directo. Si lo prefieres, puedes pedirles que te esperen en la calle pendientes de ti, o en otra sala del estudio fotográfico.
Cuándo no ir acompañado
Todo lo que hemos comentado anteriormente eran supuestos especiales en los que sí convenía ir acompañado. Sin embargo, esas situaciones representan tan solo el 15% aproximadamente de las sesiones de fotos que se realizan. Es decir, lo más frecuente y normal es que vayas solo.
Lo bueno de ir sin acompañante es que realizas la sesión a tu aire, marcando tú los ritmos y tomando tus propias decisiones. En definitiva, tienes mayor libertad. Además, se suele crear una conexión más directa entre fotógrafo y actor/actriz, que ayuda al mejor resultado de las fotos finales.
Ahora que hemos resuelto tu duda de cuando sí y cuando no ir acompañado, ya sólo queda que te prepares para la sesión: recuerda cuidarte la piel, dormir bien e ir con actitud de disfrutar.
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