Aprender a detenerse en un punto preciso sin que se note forma parte de la técnica que debe dominar cualquier actor. Convives con ellas en teatro, en rodajes de cine y TV o incluso en los castings. Por este motivo las marcas deberían formar parte de la preparación básica del actor, y sin embargo no siempre se les da la importancia debida.
¿Qué son las marcas?
Los actores no nos movemos aleatoriamente por el espacio. Aunque nuestros movimientos y posiciones parezcan espontáneos, todo está mucho más estudiado y planificado de lo que parece.
Para ayudarnos en este sentido, las marcas funcionan como guías que nos indican el punto exacto donde los actores debemos detenernos en un determinado momento en la escena.
Hay multitud de razones por las que necesitarás adaptarte a ellas, pero la más común es para asegurarte de que estás en foco durante toda la escena. Si no te colocas en la marca que te han indicado quedarás situado fuera de foco y por lo tanto se te verá borroso en pantalla, lo que hará que la toma sea mala. Puede que también, por el mismo motivo, quedes fuera de cuadro, o que la iluminación te produzca sombras o reflejos no deseados.
Las marcas pueden ser de dos tipos:
- Físicas. Se sitúan a los pies del actor y pueden tener distintos aspectos: las más comunes son en forma de T, de U, de V o una simple línea horizontal, pero también se pueden utilizar puntitos para marcar la posición exacta de la puntas de los pies. Para situarlas se puede utilizar normalmente cualquier cinta, como la de carrocero o cinta americana, aunque lo más común es utilizar la famosa cinta de cámara que se adhiere muy bien y no deja rastro al despegarse. En cada producción se sitúan las marcas de manera diferente: también se pueden hacer con tiza o utilizar las que vienen fabricadas, bolsitas rellenas de arena en forma de T y que el actor puede sentir en los pies sin tener que mirar. Aunque normalmente lo más práctico es la cinta, hay que adaptarse a las superficies de las localizaciones y a los medios disponibles. Lo importante es que quede rastro físico.
- A veces, si el plano es muy general y el suelo aparece en el plano, solo contarás con las referencias visuales de lo que se encuentra a tu alrededor, como muebles, elementos de decoración o las líneas entre los azulejos. Si te encuentras en exteriores habrás de tomar estas referencias guiándote por los elementos del paisaje. A veces este tipo de marcas no son tan claras, especialmente en planos muy cerrados, cuando lo único que tienes que mover son las manos o girar la cabeza hasta el punto exacto indicado. Este tipo de marcas son más difíciles de calcular; más adelante te explicamos cómo afrontarlas.
¿Qué dificultades plantean?
Puede que no tengas marcas físicas y debas buscar referencias, puede que tengas sólo una, o que haya muchas. Puede que haya marcas para varios actores y no solo para ti, diferenciadas por colores para evitar equivocaciones. Puede que incluso te encuentres con marcas para los movimientos de cámara. ¡Ten cuidado y presta atención para no confundirte!
Además de todo esto, las marcas pueden plantearte otras complicaciones:
- Aunque debas situarte en un punto preciso, tus movimientos nunca deben perder su fluidez, tal y como si no hubiese marca ninguna. Tenlo en cuenta, porque si no estás muy habituado puede que algunos de tus movimientos no queden justificados.
- Normalmente, aunque las tengas señaladas en el suelo, no podrás mirarlas directamente. Tienes dos opciones: utilizar tu visión periférica para que no resulte obvio que has llegado a ella o coger referencias, tal y como decíamos antes. Cada actor tiene su técnica, y es normalmente en los ensayos donde calcularás la relación con otros objetos para saber que estás en el punto exacto (dos palmos a la izquierda de la mesa, un paso por delante de esa pieza de cerámica, etc.).
Si la colocación de una marca te resulta antinatural puedes hablarlo con el director, aunque ten en cuenta que lo que tú puedes ver antinatural, pocas veces corresponde con la visión de la cámara.
Dominar la técnica
Utilizar las marcas sin esfuerzo requiere práctica. ¡Es más difícil de lo que parece! Te proponemos los siguientes ejercicios para que puedas perfeccionar tu técnica.
- Ejercita tu mirada periférica (ver con el rabillo del ojo sin tener que girarlo) para ver lo que hay a tu alrededor.
- Coloca marcas mientras haces las labores diarias en casa y cambia de una a otra con naturalidad, sin mirarlas.
- Sitúa un bolígrafo o cualquier otro objeto en el suelo y recita un texto a la vez, llegando a él y volviéndote a ir. Hazlo con precisión una y otra vez hasta que veas que el texto y tus movimientos no pierden fluidez. Al cabo de un tiempo, vuelve a cambiar la marca.
¿Nos cuentas cuales son los trucos que utilizas tú?
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